miércoles, 28 de mayo de 2008

Aquí el link

Con lupa
Rosario Díaz Araujo- Gastrónoma

¡Un respetito!

ES DE AGRADECER que entre medio de tanta cocina fusión, o mejor deberíamos decir confusión, se sigan elaborando los platos tradicionales como Dios manda.

Me preocupa la tendencia mundial de disfrazar los ingredientes y del todo vale, si total el comensal quizás ni se acuerde de cómo sabe un pimiento. De que los sabores se pierdan ahogados entre salsas de dudoso ingenio y demasiado condimento. Por lo que me declaro amante de los ingredientes puros sin camuflaje.

De los aromas nítidos que se ostentan sin pudor, de la justa y correcta manipulación de cada uno de los productos, y de las cosas claras.

Y digo que se agradece porque en Canarias todavía se pueden comer los platos como son. Y eso, desgraciadamente, no pasa en muchos lugares.

Porque si los propios cocineros regionales no defienden a capa y espada sus materias primas únicas y las resguardan, nadie lo hará por ellos.

Por eso, cuando me siento en algún restaurante y la carta se me abre de par llena de platos típicos, me provoca satisfacción, como la de un niño que se despierta por la mañana y comprueba que no pasó nada terrible durante la noche, que cada cosa sigue en su lugar.

Eso admiro de los cocineros canarios, la tenacidad para defender sus verdades y en todo caso enaltecerlas. Como cuando uno come una papa arrugada bien hecha con un mojo verde brillante que compensa de maravillas. Como un almagrote logrado, como el cabrito, como los tomates fragantes, el pulpo de La Punta y los plátanos con puntitos.

Porque me alegra saber que aquí la sencillez es bien vista y no se la oculta. Porque me encanta dejarme llevar y saber que la casa está en orden, y los puntos en su sitio.

Quizás lo que haya influido sea la insularidad, o la buena memoria de los abuelos, pero lo concreto es que han sabido resguardar el patrimonio gastronómico.

Porque me aterran los cocineros que en el afán de innovar destrozan o ningunean los maravillosos platos tradicionales. Porque admiro a las mujeres que se levantan al alba para amasar rosquetes y ofrecerlos al visitante.

Porque como extranjera, me enamoré de la cocina típicamente canaria y me alivia saber que cuando aterrice cualquier persona ajena a estas islas podrá saber cómo sabe un conejo al salmorejo y no tendrá que leerlo en un libro de historia.

Brindo por eso, por mantener intacta la esencia y los sabores.

lunes, 26 de mayo de 2008

Cocina para amantes

Nota publicada en El Día


EN GENERAL es uno de los temas en los que los cocineros nos volvemos un poco psicólogos y escuchamos atentamente. A mí me gusta creer que existen alimentos capaces de poner en funcionamiento la misteriosa maquinaria amatoria de los mortales. Me gusta pensar que si una persona se decide a enamorar desenfrenadamente a otra, dedica gran parte de su tiempo y la imaginación con un objetivo claro, éste debería cumplirse.

Para hablar de alimentos afrodisíacos hay una extensa lista de productos a los que se les adjudican dichos poderes. Digamos que en una cena que se precie de tal nunca deben faltar los mariscos, las ostras frescas con unas gotas de limón, el salmón, los aguacates, las especies como la canela y el cardamomo, los frutos secos y las hierbas frescas como la menta.

Pero el problema es que muchas veces los alimentos que aparecen en estas listas son inaccesibles. Por eso, a mi entender, uno debe usar lo que su imaginación le dicte, todos aquellos manjares que en nuestra cabeza estén cargados de sensualidad. Sorprender con las texturas y crear platos lúdicos, comer con las manos, tapas, canapés, pequeños y variados bocados con los que divertirse.

Para terminar siempre será apropiado el chocolate, helado, tibio o templado, no se me ocurre postre más sensual que un fondant de chocolate caliente acompañado con fresas y helado.

Antes de morirnos de sed y de ponernos "manos a la obra" es clave la elección de las bebidas.

El vino será el invitado de honor en cualquier cena afrodisíaca. Todos sabemos que beber vino moderadamente desinhibe y acorta las distancias. Cerrar la cena con una copa de cava o champagne augura brillantes resultados.

Preparar una cena afrodisíaca es volar hacia la tierra de los placeres, por lo que el ingrediente principal debe ser la imaginación para combinar aromas, sabores, luces, música y sensaciones.

Lo real es que la dupla comida-erotismo es muy antigua y la relación está en la secreción de dopamina en el hipotálamo y la consiguiente sensación de placer y gratificación. Estas dos sensaciones se encuentran muy cercanas y una recuerda a la otra, por esto se relacionan y allí se desata el torbellino.

Porque, cierto o no, el ritual afrodisíaco se repite desde hace miles de años y lo seguirá haciendo, afortunadamente, mientras existan amantes.

martes, 13 de mayo de 2008

Pizza Party

Toda la vida fui una fanática de reunir gente alrededor de una mesa. Desde chica, cocinaba para todos lo que llegaban a mi casa. Y ahora lo hago imaginariamente, muchas veces al mes, cuando me ataca la nostalgia preparo comidas pensado en quién me gustaría que estuviera en nuestra casa.

Hoy vamos a cocinar pizzas, un plato tan sencillo y divertido como los amigos. Así que manos a la obra.

Pizzas Party

Invitados: 8 personas

Ingredientes:

1- Masa básica

Harina: 1kg.

Levadura seca: 2 sobres de 25 gr.

Aceite de oliva: 3 cucharadas

Sal: dos buenos puñados.

Agua tibia: 500 cc. Aprox

2- Salsa:

Puré de tomate: 2 potes.

Sal y pimienta: a gusto

Azúcar: dos cucharadas

Orégano

Preparación:

Tener un bowl grande a mano, en el mismo colocar la harina, espolvorear la levadura seca y mezclar bien. Agregar el aceite. El agua la saco del grifo, la temperatura no debe quemar pero tiene que estar caliente. En la misma agua disuelvo la sal. Y empiezo a mezclar. Yo lo hago así: realizo un hueco en el centro y empiezo a añadir el agua, voy mezclando con la mano derecha y revuelvo, “agarro” la masa (en este momento engrudo, ya que el resto de la harina esta aún en el borde) y voy acercándome para tomar más harina, así hasta incluir todo. Una vez lograda una masa uniforme la amaso un poco (5 minutos más o menos) y luego la golpeo contra la mesada. La cubro con un paño y la dejo en un lugar que haga calor. Aquí la pongo en la terraza hasta que haya crecido hasta el doble de su volumen. La divido en bollos por ejemplo 4. Los pongo de nuevo en la mesada –espolvoreada con harina- y voy estirando uno por uno con un palo, o en su defecto botella, ya que aquí no tengo.

Coloco cada masa en una asadera con un hilo de aceite y cocino en un horno bien fuerte, que he precalentado un rato (20 min).

La cocino unos 10 min, de acuerdo al horno de cada uno, lo importante es que la masa ya esté despegada de la fuente. Eso significa que ya “hizo piso” y nos quedará crujiente.

Para la salsa: Mezclar todo en crudo y tener separado. Cubrir las masas a medida de que se vayan cocinando. Finalmente cubrir con los ingredientes que elijan.

Ejemplos:

De palmitos y salsa golf: colocar la salsa de tomate un poco más escasa de lo normal. Colocar el queso y el jamón. Llevar al horno hasta que se derrita el queso. Sacar del horno, colocar los palmitos y la salsa golf. Servir.

De queso de cabra y tomates secos: Hidratar los tomates, si es que vienen secos, cortar en tiritas. Cortar el queso de cabra en rodajas y poner los tomates secos. Llevar al horno. Al sacar poner un hilo de aceite de oliva y unas hojas de albahaca.

De cuatro quesos: Colocar el queso mozzarella, el parmesano rallado grueso, el queso azul (o roquefort o gorgonzola) roto con la mano en pedacitos y aquí hay uno espectacular que es el Grana Padanno, también roto en trocitos. Llevar al horno.

De atún: Colocar el queso mozzarella en rodajas, cebolla de verdeo cruda cortada chiquita y una lata de atún distribuida sobra la masa. Si te gustan, unas alcaparras. Llevar al horno hasta que derrita el queso.

Con tomates cherrys y rúcula: Es importante agregar los ingredientes crudos una vez sacada del horno y rociar con oliva.

  • Tips

Para mí lo importante es que la masa una vez leudada debe ser estirada, si la volvés a amasar la masa se pondrá resistente y difícil de manejar. Si esto te pasa, la dejas leudar nuevamente.

lunes, 5 de mayo de 2008

Decálogo del consumidor Feliz en EL DIA


Esta es mi segunda nota publicada en EL DÍA.
Todavia no consigo bajarme de la nube de felicidad.

Para ver la nota aquí.